La importancia del Juego grupal

En nuestra página parque de bolas http://parquedebolas.com, contamos con numerosos artículos que contribuyen al juego en equipo. A continuación, hablaremos de las ventajas que este tipo de juegos tienen sobre el desarrollo infantil.

 

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El juego en grupo tiene multitud de beneficios que contribuyen a un correcto desarrollo físico y psicológico del menor.

 

Sobra comentar cómo influye el juego activo en el desarrollo físico del menor, pues está comprobado que el ejercicio previene la obesidad infantil y puede evitar la aparición de ciertas enfermedades en el futuro, además de favorecer el sueño al sentirse agotados después del esfuerzo físico.

 

Desde el punto de vista psicológico, el trabajo en equipo les hace pensar en el beneficio común y a superar el egocentrismo inicial que caracteriza al niño en sus primeras etapas, creando una actitud de equipo positiva y desarrollando el sentido de la responsabilidad.

 

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El formar parte de algo, compartiendo logros y derrotas, mejora su autoestima, aumenta la confianza en sí mismo a la vez que desarrolla su sentido de la humildad. Todo esto supone una mejora en la capacidad de socialización.

 

En ocasiones, el deporte en equipo es sinónimo de paciencia. Esperar tu turno o el simple hecho de practicar o entrenar, supone un desarrollo de esta cualidad. La creación de ciertas rutinas derivadas de los horarios de entrenamiento o el cumplimiento de las normas de juego, les ayuda a ser mas disciplinados.

 

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Ya tenemos claro que el juego en equipo es positivo. Y ahora, ¿cómo lo fomentamos?

 

Las actividades en equipo deben iniciarse desde los primeros años, acostumbrando así al menor, a seguir las normas, adquiriendo la disciplina necesaria para el juego posterior. Los juegos de mesa en familia son perfectos para esto.

 

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Lo primero que debe hacer el adulto es ayudar al infante a asimilar el reglamento del juego y que entienda que es parte de un equipo. Por otro lado es conveniente que los equipos varíen su formación, para que el niño entienda el sentido de grupo por encima de su individualidad. Esto también contribuirá a familiarizarse con la frustración de la derrota y aprender a superarla.

 

Aunque naturalmente los niños desarrollan capacidades cooperativas por si mismos llegados a una edad, la estimulación temprana de las conductas en equipo los ayudará a una mejor adaptación social futura.

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